Dentro del aula es muy importante la forma en que nos comunicamos con nuestros alumnos, de ella depende la relación personal y afectos que se formen con ellos. Una buena relación personal alumno-maestro es muy importante para el proceso enseñanza aprendizaje, ya que si el alumno le tiene confianza al profesor y viceversa, ya que se establecerá una buena comunicación cargada de sensibilidad y afectividad que le ayude en su crecimiento personal, que ayude en la construcción de significados, una comunicación democrática dentro del aula, que fomente un clima de tolerancia y de progreso.
Como profesores debemos motivar a nuestros alumnos, valorando su esfuerzo y progreso, exaltando lo bueno, para esto solo basta un “bien hecho” y muchas veces solo una palmada o una mirada.
En estos tiempos de cambios vertiginosos hemos dejado atrás la tradición oral, para darle paso a las nuevas tecnologías de comunicación. Hoy día los medios de comunicación tiene gran influencia en la sociedad, tienen el poder de imponer modas y generar necesidades en ella, pero sobretodo debe preocuparnos que tienen el poder de alienar a la sociedad.
En este contexto nuestra tarea educativa consiste en formar ciudadanos que no solo sean receptores pasivos de una realidad transmitida por los medios de comunicación, sino que sean capaces de analizar, criticar y reflexionar para formarse una opinión propia de la realidad que están viviendo.
Para esto podemos echar mano de estas mismas tecnologías y aplicarlas dentro del aula de clase, pero no de una forma mecanizada, sino haciendo énfasis en el análisis y la reflexión, con un carácter humano.
Debemos ver estas tecnologías como herramientas, como mediadoras del proceso enseñanza-aprendizaje, no debemos aplicar las TIC por moda, debemos darle verdadero significado, aplicarlas para desarrollar competencias, desarrollar conocimientos que puedan ser aplicados en la vida cotidiana.
No olvidemos tampoco nuestro papel como docente, que es el de mediador del proceso enseñanza-aprendizaje, motivador, debemos también fomentar la comunicación y buenas relaciones personales alumno-maestro y alumno-alumno.